
Uno de cada tres niños en el mundo ha sido víctima de Acoso Escolar o “Bullying”.
¿Qué es el bullying?
Uno de cada tres niños en el mundo ha sido víctima de Acoso Escolar o “Bullying”. De no tomar medidas a tiempo, el menor presentará cuadros de angustia y ansiedad permanentes y se formará una personalidad que lo predispone a enfermedades psicológicas que, a futuro, le dificultan establecer relaciones personales, laborales y sociales.
De acuerdo a estudios de salud pública, el molestar de manera permanente a un compañero en la escuela, ponerle algún sobrenombre, ofenderlo o agredirlo física o psicológicamente, es una forma de maltrato conocida como “Bullying” (vocablo en inglés que significa pandilleros o pandillas).
Éste concepto se empezó a estudiar en la década de los 70´s en Europa, al registrarse una mayor incidencia de niños que se suicidaban y se descubrió que quienes se suicidaron tuvieron antecedente de hostigamiento y agresión por parte de sus compañeros de escuela, lo que provocó que presentaran cuadros de angustia y depresión.
La agresión puede ser verbal, con insultos, burlas o descalificaciones, o por omisión, que incluye no ser aceptado para trabajos en equipo y exclusión por sus pares en actividades escolares o deportivas.
El papel de los observadores
Para que se dé este fenómeno es necesario contar con tres actores: el agresor, la víctima y los observadores. Estos últimos juegan un papel muy importante, ya que son el mecanismo para agredir o propiciar que el agresor dañe a la víctima.
El niño que es inseguro, introvertido o presenta algún problema físico. Por ejemplo que sea muy delgado o gordito, use lentes, tenga alguna enfermedad o malformación congénita, es más susceptible de sufrir este maltrato.
Los agresores son niños que tienen antecedentes de ser violentos y muestran una actitud de poder ante un grupo -conducta que los hace sentir satisfechos-; por ello, tienden a perpetrar este tipo de comportamiento.
El agresor puede ser de dos tipos: el activo, porque directamente molesta al compañero, le pega o intimida, y el pasivo, quien busca mecanismos, a través de otros compañeros, para difundir algún rumor o chisme que incomode a la víctima; es decir, propiciar el ambiente para que el niño sea “etiquetado”.
Las Consecuencias del bullying
Esta situación, provoca bajo rendimiento escolar con su consecuente deserción del centro escolar y es común que busquen mecanismos para no asistir a la escuela y, para ello, somaticen enfermedades, como dolor de cabeza o estómago.
El impacto en el desarrollo psicológico del agredido lo puede llevar a agredir severamente a otros o a la auto-agresión, al consumo de sustancias y en su forma más extrema al suicidio.
La clave contra el bullying: Actuar a tiempo
Si los padres de familia observan este tipo de conductas en sus hijos, deben hablar con ellos para conocer el motivo de su cambio de comportamiento y, en caso de ser maltratados por sus compañeros, se tomen las medidas pertinentes para evitar problemas emocionales que después pueden ser más graves.
Es importante que padres de familia, maestros, médicos psicólogos, psiquiatras y la sociedad en general, conozcan las características de este fenómeno, con ello, podrán identificarlo y tratarlo oportunamente.
¿Deseas más información?
Supermujer es la primera organización sobre información en materia de desarrollo, motivación, y superación personal para la mujer. Completa el siguiente formulario para recibir totalmente gratis la información sobre nuestros artículos, publicaciones y seminarios en tu ciudad; y si quieres hacer una primera consulta personalizada, puedes enviárnosla aquí.