Manuela Carmena no deja de encabezar titulares. No es para menos. Esta mujer está a punto de convertirse en la nueva alcaldesa de Madrid.
Que levante la mano quien supiese de la existencia de Manuela Carmena hace unos meses. ¡Vaya, me parece que no veo muchos brazos alzados! Y, sin embargo, en las últimas semanas, su nombre no deja de encabezar titulares. No es para menos. Esta mujer está a punto de convertirse en la nueva alcaldesa de Madrid.
A grandes rasgos, creo que muchas conocemos ya a la señora Carmena y podríamos responder a un par de preguntas en un examen sobre ella sin miedo a suspender estrepitosamente. Yo no quiero contarte nada que ya sepas, no quiero aburrir a nadie con datos ya cacareados hasta la extenuación. Al contrario, ¡voy a contarte algunas anécdotas sobre ella que no son tan conocidas!
¿Sabías que…
… es una gran aficionada a la bicicleta? Como lo lees. Manuela tiene dos bicicletas, una normal y otra eléctrica, a la que considera un gran invento, ya que con ella «no llegas sudando al trabajo». Además, cada verano hace una escapada ciclista con amigos, dentro de España o en el extranjero.
… no fue asesinada por puro milagro? En 1977 estuvo a punto de morir en un atentado perpetrado por tres ultraderechistas contra el despacho laborista que había fundado junto a varios abogados. Murieron cinco personas.
… es abstemia? No bebe nada de alcohol y alega que este le produce dolores de cabeza. En cambio, sí que le gusta mucho el café con leche, las magdalenas y las pulgas de jamón serrano.
… siempre lleva el reloj adelantado 20 minutos? Lo hace para compensar el tiempo que puede tener que pasar esperando a que llegue el metro en Madrid. Manuela Carmena es una gran amante del transporte público.
… es el alma de un proyecto de reinserción de presas? Después de jubilarse, Manuela creó el proyecto y tienda Zapatelas con la intención de que mujeres en riesgo de exclusión social puedan ganar un dinero vendiendo ropa para niños confeccionada por ellas mismas.
… es pionera en la legalización de las drogas? Ya desde finales de los años ochenta, tristemente trágicos por los estragos causados por la droga en muchas zonas de España, Manuela Carmena abogaba por su legalización, «lo único que falta por probar [en la lucha contra la droga]». En su opinión, resulta evidente que las medidas represivas no funcionan y únicamente sirven para convertirla en un lucrativo negocio para unos pocos.
… es radicalmente contraria al uso del coche oficial? Manuela se pasó más de 20 años rechazando el coche oficial que se le ofrecía. Únicamente lo aceptó después de ser amenazada por la banda terrorista ETA.
… las monjas del colegio al que asistía de niña le inculcaron justicia social? Aunque no de la forma en que uno pensaría, sino al contrario. Según cuenta en su libro Por qué las cosas pueden ser diferentes, una de las religiosas le explicó que los Reyes Magos no visitaban los barrios pobres para no ensuciar sus preciosos mantos «de terciopelo y armiño». Al parecer, las monjas le transmitieron «quizá a su pesar» el espíritu reivindicativo.
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